26 de mayo de 2011., primera acción de "Acampadadespi", una cassolada delante del ayuntamiento.de Sant Joan Despí.
Entrevista a mi misma, siguiendo las pautas del diario "Publico"
1.
¿Participaste en la primera manifestación del15-M?
No, no sé porqué:
Ese día seguro que no acababa de creerme lo que estaba pasando. Fueron mis hijos
los que después de asistir a la gran manifestación de Barcelona, me contagiaron
su entusiasmo. Entonces empecé a informarme y a comprender que algo nuevo
comenzaba. .
2. ¿Te
convencieron o convenciste?
Empecé a
entusiasmarme con la idea, y quise participar, seguro que costó poco que me
convencieran, todos y todas teníamos mucho en común.
Pero creo que yo no
logré convencer a nadie. Mis amigos y
amigas todavía no participan, aun así
sigo tratando de convencerles.
3. Los
motivos que te indignaron
Sobre todo la
prepotencia de la clase política. El comprender que todo estaba atado y bien
atado, que la democracia era una mentira al servicio del capital. Y que solo
nos era permitido sentir y padecer la impotencia.
4. Los
motivos para volver a indignarte
No he dejado de
indignarme. La política cada día me da nuevos motivos. Pero ahora sumamos
conciencia cada día un poco más y la anestesia ya no nos libra del dolor, lo
peor es el miedo. Quieren acabar por la fuerza con el movimiento.
5. Un
momento especial
Ha habido muchos
momentos inexplicables. Asambleas en las que miradas y gestos nos unían. Pero
recuerdo especialmente el 27 de mayo. Salí de casa muy temprano, dejando a mis
hijos durmiendo. A media mañana los llame para organizar como siempre las
compras y la comida. No estaban. Se habían ido a la plaza de Catalunya. Yo
sentí que tenía que estar con ellos. Y vivimos juntos una digna batalla (que no campal) en la que
creímos retomar la plaza como vencedores. Sin embargo más tarde comprendimos
que no fue así. El conceller sigue impune.
6. Un
error
Todo necesita de un
tiempo para madurar. Un aprendizaje. No hay una cultura participativa. Nos
eternizamos en las acciones. Y nos perdemos en los egos. Pero poco a poco
se que conseguiremos organizarnos.
7. ¿Qué
aportaste?
No estoy segura,
pero creo que sobretodo, ánimos. Participar y minimizar el hecho de que en Sant
Joan Despi las voces críticas estén tan divididas. Algún día comprenderemos que
deseamos lo mismo.
8. ¿Qué
ha cambiado con el 15-M?
Supongo que la implicación
más activa de mucha gente en la política. Desarrollar una actitud crítica y de
compromiso. Las plazas tienen un valor añadido, un valor de encuentro, de conocimiento y aprendizaje para luchar
contra el aislamiento de las políticas perversas.
Quizás este sea el
pequeño gran cambio que hay que reconducir, no para hacer del 15M un partido
político, ni definir una línea ideológica determinada, sino para trabajar desde
todos los ámbitos, educación, sanidad, administración… una participación
ciudadana real.
9. ¿Sigue
teniendo la misma fuerza que hace un año?
Parece que desde
que se abandonaron las acampadas, disminuyo la participación. Yo creo que la fuerza se ha
transformado. La conciencia una vez que se despierta no pierde fuerza, solo se
calma, con la única intención de encontrar el camino común. Una de las muchas frases
maravillosas que acuñaron el pensamiento de las plazas, y que anticipaba la
necesidad de que no tuviéramos prisa, que los cambios llegarían poco a poco,
era: Vamos despacio porque queremos llegar lejos.
10. ¿Hasta
dónde crees que llegará?
Lejos, muy lejos… y en silencio.
